lunes, 20 de septiembre de 2010

Sin extremos

A nivel mundial hay una gran ola de movimientos pro-animalistas y activistas ambientales que la verdad admiro, pero hasta ahí, otra cosa es que pretendan imponerme un estilo de vida que proponen desde hace rato, un estilo de vida sin algo que tanto quiero, mis perros, eso sí es otro cuento. Ahora me explico, es que resulta que andan por ahí promoviendo la esterilización canina con el fin de detener la sobrepoblación sin darse cuenta ni prever que de cumplirse sus deseos podría darse una sub-población que solo puede desembocar en el fortalecimiento de un oligopolio que vienen intentando construir hace años los clubes caninos y asociaciones como el kennel club a nivel mundial o la ACCC (Asociación Club Canino Colombiano) a nivel local.

Es importante resaltar que si bien la cría indiscriminada es o debería ser un delito, es también de suma gravedad la “selección adecuada” que promueven “los que saben de perros”, esos bastardos sin nombre que sacrifican camadas enteras por el mero hecho de no tener los patrones o características que ellos necesitan para poder vender los cachorros a 2 o 3 millones de pesos por decir lo menos, pues sé que en el país hay perros que han sido comprados hasta por 4000 Euros, obviamente es con fines lucrativos que alguien hace una inversión de tal magnitud, pues la amistad no se puede comprar.

No pretendo dañarle el negocio a nadie y mucho menos desprestigiar a esos idiotas, creo que con esto no voy a lograr más que aplausos de un bando y rechiflas del otro, quizá rechiflas de pare y parte, no me importa, necesito hacer saber que así como es un crimen la cría indiscriminada y “la selección adecuada” lo es también la acción de discriminar al ser humano de poder compartir su vida, su amor con el único ser tan fiel como la mamá, su perro. La tendencia a despoblar el planeta de canes va a obligar a que los niños solo los puedan conocer en exhibiciones de los mencionados clubes cual si fuera un zoológico, vamos a llegar a decir que alguien tuvo la fortuna de tener un perro en su casa mientras los niños oyen esto boquiabiertos, pero que gracias a los proteccionistas extremos, es un animal en peligro de extinción.

En lo personal considero más importante educar a la gente, sensibilizar al amo, combatir el maltrato y tener crías responsablemente, pues más que una mercancía el perro es un amigo, y un amigo no tiene precio.


Jorge Leonardo Gaitán Guerra

lunes, 6 de septiembre de 2010

El mundo tiende a ...

Hay muchas tendencias en nuestro mundo, tendencias de moda, tendencias decorativas, tendencias tecnológicas, etc, veo a la ventana y me asombro al ver como la gente se viste según las ultimas tendencias, tendencias que definen un montón de rodillones que no tienen nada de gusto, que creen tener la idoneidad para vestirse de la forma menos convencional posible con el fin único de lograr una combinación abominable y asquerosa a la que llaman: moda, tendencias que el ser humano sigue como borrego, digo, van por ahí vistiendoce de halloween todo el año; con que derecho estos fabulosos "iconos" de la moda mundial vienen a dictarnos estas tendencias en contravia con el buen gusto?, veo que ellos atentan sobremanera con la integridad psicológica de cualquier individuo, porque a menos que uno sea apellido Ruiz de la Prada puede ver esas atrocidades como una verdadera obra de arte.

Pero bueno, por gracia divina nadie puede obligarnos a usar ropa horrible, bueno, a menos que uno sea cajero de banco(mi admiración total a los cajeros de banco) , ahora quiero referirme a mis fobias "tendencieras" que sin duda ya han causado algún daño en mi: para empezar un día me dijeron que los libros y ediciones impresas tendían a desaparecer, por esto decidí leer mas en el PC y así acostumbrarme para cuando el momento llegara, pero ahora tengo astigmatismo, por qué? Seguramente casualidad pero a algo tengo que culpar, me dijeron: las revistas tienden a ser digitales, por ende aborté mi iniciativa de tomar una suscripción, pues no voy a pagar porque me manden una revista vía e-mail, hace mas o menos un año decían por ahí que los celulares no iban a perdurar, que tienden a desaparecer por la comodidad del ser humano, pues nos quitan libertad, pero no, ahora permanezco no con una sino con las dos manos sobre un teclado QWERTY que a decir verdad de nada me liberó.

Tengo que aceptar que cuando escuche que los libros digitales tendían a robarse el mercado me alcance a ilusionar con el hecho de que `probablemente era un cambio el que se acercaba y que de pronto hasta podríamos oír que el medio ambiente tendería a recuperarse, pero no, por mas que los lectores sacrifiquemos el olor de un libro por el favor del planeta jamás será suficiente, pues las ciudades, monstruos de concreto, lastimosamente tienden a crecer.

Jorge Leonardo Gaitán Guerra

Julián Rodríguez - Mi vida sin tú